Hay dos formas de copiar un producto icónico, al menos según nuestra cuarta edición de "Cómo mangonear en China e irte de rositas": o calcas todos y cada uno de los detalles del exterior del ítem en cuestión para lanzar una réplica que podría pasar por el producto original, o directamente vas por lo barato e intentas poner una marca sospechosamente parecida a otra real en un cacharro que no tiene nada que ver con el original. Cualquier otra solución, puede traer al mundo a aberraciones como este "Segway" de cuatro ruedas, que parece haber sido cazado en Francia. Por lo que se ve, el fabricante responsable de semejante aborto carecía de las nociones básicas de física para crear una versión autoequilibrada con tan solo dos ruedas, así que para arreglar las cosas, le han pegado otro par adicional, además de un precio de 399 euros que nos ha partido las costillas de la risa.Fuente: Engadget
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