Si estás trabajando en un nuevo y potencialmente mortífero medio de transporte unipersonal, has de pensar que además de revolucionar la industria, deberías satisfacer la morbosa curiosidad del público, que querrá tener una última imagen de tu trayecto antes de estamparte contra el suelo. Y mira tú por donde, Twenty20 quiere echarte una mano. El fabricante de la VholdR la describe como una videocámara portátil, que no de casco, por lo que asumimos que ha sido diseñada para engancharse a tu bata de científico loco o chaleco salvavidas, antes que a tu seguramente ineficaz protector craneal. Te lo pongas donde te lo pongas, solo has de colgártelo, pulsar el botón y lanzarte a la aventura, sabiendo que unas lentes rotatorias con un ángulo de 192º estarán grabando tus últimos momentos, empleando una doble alineación láser y un sistema de compresión de calidad, con la confianza, además, de que tu impacto o explosión no dañará su interior, gracias a una resistente carcasa de aluminio a prueba de golpes y salpicaduras. Por fin alguien piensa en nosotros.
Se pondrá a la venta en la temporada estival por 349,99 dólares (250 euros al cambio). Las reservas ya están abiertas, por cierto.
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